UN CAFÉ CON ADHEMAR MANJÓN
Publicó en 2016 la novela "Génesis 4:12" con la editorial "La Perra Gráfica", en 2021 el libro de cuentos "Los Fantasmas del Sábado" y la novela "Los belgas" con la editorial 3600.
Nos citamos en un café en la tarde. Adhemar se pide un café con leche acompañado de empanada de queso y un cuñape. Mientras traen el pedido, le pregunta al mozo si puede poner la música de ambiente. Le preguntamos que albúm pondría y nos dice: "Quizás Spiderland, de Slint..." y así fluye la charla:
Si pudieras ser un personaje de ficción por un día, ¿Quién serías y qué harías?
Ok, si es solo por un día: Werewolf Jones cuando da conciertos con su amiga Megg en la banda –o dúo, mejor dicho- Horse Mania. Werewolf Jones es un hombre lobo, creación del historietista australiano Simon Hanselmann, quien le dedica todo un libro a Horse Mania bajo el título de Below Ambition (así se llama una de las canciones del dúo). En realidad, apenas tocan en sus conciertos (y lo hacen muy mal porque tampoco ensayan), se la pasan borrachos y drogados, puteando al público y a otras bandas. Una experiencia intensa para todo un día.
Si tuvieras una varita mágica y pudieras 'robar' un poco del poder de otro libro para tus propios escritos, ¿Qué libro 'asaltarías' y qué aspecto en particular?
En este caso, mencionaría algunos libros del historietista noruego Jason (John Arne Sæterøy). A Jason lo empecé a leer por 2013 más o menos, y siempre pensé en sus trabajos cuando trataba de escribir los tres títulos que llevo publicando. Jason trabaja con distintos géneros, como el noir, la ciencia ficción y la fantasía. Además, la mayoría de sus títulos no alcanzan las sesenta páginas, lo que también me hacía pensar mucho sobre cómo resolvía sus historias en ese formato tan breve. Tiene un humor bastante parco, en parte me imagino porque es fanático de cineastas como Jim Jarmush y Aki Kaurismaki (y porque es noruego, claro). Si tengo que mencionar los libros suyos que más me gustaron y que he releído bastante, serían: Yo maté a Adolf Hitler, ¿Por qué haces esto?, Espera…, No me dejes nunca y Los hombres lobo de Montpellier.
¿Lo mejor y lo peor que te dio la literatura?
Lo mejor: Creo que me dio un norte, es decir, desde que me di cuenta que además de leer, también se abría la posibilidad de que yo pudiera escribir, me aferré a eso. Así que todo pasaba (y sigue pasando) por leer y descubrir diferentes cosas en esas lecturas, y luego viene escribir.
Lo peor: En realidad lo peor es una preocupación que me asoma casi a diario: Si alguna vez nos vamos de Bolivia de nuevo ¿Cómo haremos para llevarnos todos los libros que tenemos? Ese pensamiento no me deja dormir.
¿Cuál es el libro que más regalaste y por qué?
Alguna vez pensé que sería lindo tener un libro preferido para regalar, pero después me pareció cursi hacerlo. Un amigo me dijo una vez que él un tiempo había regalado El otro gallo, de Jorge Suárez; yo pensé que podría hacer eso con Cuaderno de sombra, de Julio Barriga. Pero desistí de la idea antes de comprar un solo ejemplar del libro de Barriga. Y tampoco regalo muchos libros en general.
¿Qué papel juega la música en tu proceso de escritura?
Bueno, siempre que estoy en la computadora, escribiendo o no, estoy con los audífonos puestos, escuchando música. Así que, más que todo, la música es mi compañera en el proceso de escritura. De vez en cuando la letra de alguna canción o el concepto de un álbum ayudan a disparar una idea, así que me gusta estar atento a esas señales también.
¿Qué escritor fallecido te gustaría tener como profesor en un taller literario?
Nunca fui seguidor de los talleres literarios, me da mucho pudor esa experiencia, pero como quiero responder esta consigna, me hubiera gustado conversar un par de horas con Carlos Busqued, nada más para hablar sobre el cómic Alak Sinner (me lo compré porque Busqued lo recomendó una vez y me gustó muchísimo) y preguntarle qué otras cosas de ese estilo me sugiere.
¿Qué libro prestaste y nunca te devolvieron?
Varios, quizás el más importante es La conjura de los necios, de John Kennedy O’Toole, que incluso me ofrecieron pagármelo para que lo olvidara jeje. Igual, lamentablemente tengo unos pocos libros que yo tampoco devolví y me da vergüenza hacerlo a estas alturas.
Si pudieras retroceder en el tiempo, ¿Qué consejo le darías a tu yo joven que quiere convertirse en escritor?
Sé que critiqué lo cursi en otra pregunta, pero, más que un consejo para convertirse escritor, le enviaría la canción Terror de El Mato A Un Policía Motorizado, a ver si así se calma un poco.
¿Cómo tienes organizada tu biblioteca? ¡Muéstranos una foto!
Antes la organizaba por países, pero me tomaba mucho tiempo organizarla así, ahora pongo los libros como sea, aunque tengo un estante aparte de estos solo de literatura boliviana.